Arreglemos el Mundo

 “No tenemos en nuestras manos la solución a los problemas del mundo, pero ante los problemas del mundo tenemos nuestras manos” Teresa de Calcuta.



Y con un café en las manos se empieza a arreglar el mundo.


¿Cuántas ideas surgen ante el silencio atronador del paisaje, los avisos invisibles de la naturaleza, la sabia sapiencia del entorno, su milenaria historia, la noche de los sueños, el atardecer...?


Ponemos tanto empeño en el debate, en llevar razón que olvidamos escuchar y perdemos la visión de las grandes verdades, lo esencial, lo principal, lo efímero...


Si tan solo, tan solo, por un instante, empleáramos la vehemencia que imponemos en nuestra verdad (que no argumentos) en escuchar... 


El mundo grita en un país que no escucha, se enroca, no cree, no ve... en nuestras manos está... solo hay que escuchar y ser vehementes en ayudar.


A veces el café puede ser lo más relajante para prepararse, para planificar, para escuchar…


Un brainstorming, una lluvia de ideas con cada sorbo mientras cierras los ojos saboreando y degustando cada sabor que expresa su acidez, su dulzor.


Dulzura amarga, a veces, su color, olor a leña, café recién hecho, recién servido y enfriado, sensaciones, emociones que se exacerban a cada sorbo, con cada olor un recuerdo, una idea asociada… 


Ahí empieza a jugar nuestra #creatividad


Para desconectar, para viajar, a través de la iMaginación, hacia nuevas ideas, hacia una solución. 


¿Te apetece un café? 

Te escucho...

iMagina...

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