Per Aspera Ad Astra

 Júpiter y sus Lunas. Captaba anoche estos momentos donde la Luna pretende brillar más que el Dios Júpiter y sus lunas. El cielo estrellado eclipsado por ambos colosos que se enfrentan y complementan con su luz, entonando toda su luz y música, dejando una noche sinfónica mágica.






Somos notas en este universo, vibramos, cada cual toca su propia melodía, a veces en armonía, a veces una sinfonía, una suite, ópera, clásica, rock all roll…


A veces estriba en nuestro estado de ánimo y vamos tocando y escuchando aquella música que nos aletargue o nos saque del letargo, que nos acelere, que nos haga brillar.


Los cuerpos celestiales, ambos astros, compiten por captar nuestra atención… tocan una melódica sinfonía que apenas percibimos, que gritan en su máximo esplendor, un alegro para hacerse oír y ver.


Pero, ¿hacia dónde miras tú? 

¿Hacia ti, hacia los demás, hacia el cielo?


Dentro de ti seguro que también la Luna y Júpiter compiten por hacerse con tu admiración y atención. ¿A qué le prestas atención? ¿Te incita y motiva o te aletarga y paraliza?


Mírate, dirígete hacia las estrellas. “Per Aspera ad Astra”


La magia de las estrellas, su sinfonía resuena dentro de ti.


Cántala, sácala, descúbrete.

Toca tu sinfonía.


Mira al cielo de vez en cuando con ojos de admiración e ilusión.

Es fascinante, cuando acercas la vista, ves sus imperfecciones perfectas, su armónica forma, su brillo gracias a sus lunas. Es un trabajo de equipo. Es una orquesta celestial.


“Per Aspera ad Astra”


iMagina…

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