En un cielo azul,
Que pronto estará estrellado,
Atrapa la espigada mano,
De las ramas secas de este árbol,
Para lucir de noche,
Con las estrellas a su lado.
Y de lo más inerte,
Surge la belleza de la naturaleza.
Parece como si se estirase, como si las raíces del cielo pretendieran alcanzar el agua, se aferra a la vida, se acerca al cielo y dibuja su firmamento.
Me encanta. Sabes... a veces nos autoconvencemos de nuestros propios defectos. Los sonorizados y verbalizamos como lamentos de autocomplacencia. ¿Verdad? No digo que no... que no te lo parezcan... tal vez... pero... y si cambias de contexto... quizás se conviertan en fortalezas esos defectos... y sabes qué... estamos cambiando de contexto... en una época de cambios... y un cambio de época... ¿No te parece? Quizás tengas más virtudes de las que piensas! Estírate y alcanza las estrellas... aunque... tal vez... tú seas una estrella!
Brillas aunque no lo sepas.
iMagina...
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